En el aniversario de Santa Cruz de la Sierra, la ciudad se redescubre en imágenes que retratan su gente, sus paisajes y su identidad. Dos fotógrafos, José Rolando Ruiz López y Edu Silva, han creado un homenaje visual en fotografía y video que muestra cómo la técnica, el arte y la tecnología convergen para contar historias desde el corazón cruceño.
Dos miradas, un mismo homenaje
José Rolando Ruiz López, nacido en Santa Cruz hace 28 años, lleva nueve años dedicados a la fotografía. Su pasión nació en la iglesia Dios con Nosotros, donde tomó sus primeras imágenes y descubrió un camino que lo llevó hasta Buenos Aires para especializarse en moda y cine. Desde entonces ha trabajado con reconocidos influencers, modelos y personalidades, colaborando además con marcas internacionales que fortalecieron su visión profesional y artística.
“Uno de los grandes desafíos al hacer fotos con el celular es mantener la calidad en escenarios de poca luz y lograr colores naturales sin perder detalle. La tecnología de HONOR me ayuda siempre a superar estas limitaciones gracias a su excelente rango dinámico, precisión en los tonos y capacidad de adaptación. Esto me permite trabajar con mayor libertad y mantener mi estilo visual emotivo y cinematográfico, incluso en contextos que antes eran un reto. Muchos no creen que las fotos que subo a mi página son hechas con un celular”, explica Ruiz.
Por su parte, Edu Silva aporta una mirada distinta. Con siete años de trayectoria, se ha dedicado a la fotografía de aventura y retrato, recorriendo los nueve departamentos del país y trabajando con marcas nacionales e internacionales. Su trabajo audiovisual le valió, hace dos años, el reconocimiento al mejor cortometraje a nivel nacional. Actualmente explora el mundo cinematográfico como una extensión natural de su pasión por la imagen.
“Usualmente cuando tomas fotografías con el móvil no tienes mucha versatilidad en distancia focal y nitidez, pero con la tecnología de HONOR ya no te preocupas por eso. Puedes capturar fotos con tal resolución que permite hacer recortes extremos y mantener buena nitidez, además de contar con distintos lentes de calidad. Eso abre nuevas posibilidades creativas”, señala Silva.
El aporte tecnológico detrás de la creación
El HONOR 400 incorpora una cámara principal de 200 megapíxeles, un sistema que ofrece gran nivel de detalle y definición incluso en ampliaciones o recortes extremos. A ello se suman algoritmos de inteligencia artificial y estabilización dual, que facilitan capturas más nítidas en movimiento y en condiciones de baja luz. Estas virtudes no solo permiten obtener imágenes de alta calidad, sino que amplían la libertad creativa de los fotógrafos al darles herramientas más cercanas a la fotografía profesional en un dispositivo móvil.
Fotografía y memoria de una ciudad
Ambos creadores coinciden en que fotografiar Santa Cruz no es solo documentar un lugar, sino rescatar la esencia de su gente. Sus imágenes buscan transmitir orgullo, cercanía y modernidad, recordando que la ciudad vive en sus calles, en sus rostros y en quienes la miran desde adentro.
En esta celebración, el lente móvil se convierte en una herramienta para consolidar la memoria visual de Santa Cruz. Un homenaje que, más allá de la tecnología, destaca la capacidad de la fotografía para unir tradición y contemporaneidad, mostrando que la ciudad también se narra a través de sus creadores.